En internet 7 meses no son nada o son mucho, según se mire. Para mi es todo un mundo desde que decidí lanzarme a contar mi día a día como padre novato, y sobretodo después de descubrir un movimiento de Padres Blogueros que también van en la misma dirección: visibilizar lo que ya es una realidad.
No lo voy a negar, viendo mi entorno de amistades y conocidos, me siento privilegiado. Me siento privilegiado porque estoy viendo crecer a mi hijo cada minuto, estamos compartiendo mucho y muy intenso y sobre todo, que con #MamáEnajenada hemos formado un tándem perfecto.
Mi situación personal, estar en desempleo, hace que cuide de #Bichillo, haga las labores del hogar pertinentes y mientras lo intento compaginar con mis diversos proyectos profesionales, ya que aunque esté en paro, non stop desde que me levanto hasta que me acuesto. Al grano, estar con #bichillo cada minuto es oro y por eso me siento privilegiado, porque le veo crecer, descubrir y ser una personita que va desarrollandose. Aunque hay días y días… y más con los cambios de hora … ya sabéis / you know 😉
Quitando una época que yo trabajé temporalmente, y estuvo en la guarde, experiencia que recomiento al 100% para ellos, prácticamente el 75% de estos 2 años ha estado con nosotros. Y el tema de la conciliación ha sido clave, por suerte la empresa de #MamáEnajenada nos lo puso muy fácil y más allá de los meses reglamentarios tuvo un plus. En mi caso, al estar en paro, no había problema. Desde el minuto 1 trabajo en equipo al 100%
Cuando llegó el momento de la incorporación de #MamáEnajenada, llegó el momento de Papi Poppins. A full time con #Bichillo, y aqui reabro el melón de la conciliación y los permisos paternales: Debería ser obligatorio que todos los padres estuvieses un tiempo largo en la crianza de sus hijos. Lo agradecerán y los dos aprenderán juntos.
A pesar de levanterme muchos días, algo desanimado pensando por el tema laboral y en buscar trabajo, o el tener reuniones profesionales donde #Bichillo se viene conmigo como uno más, lo que es cierto que ya es parte intrínseca de nosotros y nuestra familia. Vamos, venimos, estamos en casa jugando, voy a Paro a que me vean el careto con él.. vamos, que combinamos nuestras vidas a la perfección. Ahora ya hace sus pinitos en la cocina, escuchamos mucha música juntos, bajamos al parque, hacemos la compra, estamos organizando la campaña de #YoTambiénCambioPañales y por la tarde le contamos a #MamáEnajenada lo que ha dado de si el día, etc. Y esto, amigos, debería ser algo normal en la sociedad de hoy en día: poder disfrutar de ver crecer a tus hijos de pleno.
Por eso me siento privilegiado a pesar de todo.
PD: Aunque no sea muy de escribir en el blog, si que soy más de twitter… allí cuento más cosas @papipoppins
Papi Poppins 
Ayer contaba yo mi caso, en el que desafortunadamente me siento afortunado, no voy a spamear si quieres lo lees, pero en definitiva que tienes razón, todos deberíamos hacer lo que estuviera en nuestras manos para pasar más tiempo con nuestros hijos, para eso los hemos tenido ¿no?
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Lo leí, lo leí!… y en parte es culpable de que me arrancase a compartirlo 😀
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